Un día lucifer pensó que hasta aquí habíamos llegado y decidió actuar.
Una imagen nos dejó el Señor de su Resurrección, y para ser una impresión de rayos de luz sobre una tela, no dejó de ser realista.
Él nos dijo que la lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas.
Una imagen realista nos dejó su Madre en la tilma de un indio pobre.
Él ordenó a una monja polaca, que hiciera un cuadro de él mismo para extender la devoción a su divina misericordia, y ella en ningún momento se planteó algo que no fuera una imagen realista.
Millones de almas se han encontrado con él gracias a una imagen, y la mayor parte con una imagen realista. Porque Él nos dijo que la lámpara del cuerpo es el ojo.
El cineasta hizo una película con imágenes realistas y con ella llegó el escándalo aunque también innumerables conversiones.
Una Piedad de Miguel Ángel, una Madonna de Botticelli, un descendimiento de Van der Weyden, un Cristo de Velázquez, suscitan el encuentro con él.
Así que un día lucifer pensó que hasta aquí habíamos llegado y decidió actuar, porque él sabe de luz y de belleza, que una vez tuvo, pero no retuvo, y le escuchó al Maestro que la lámpara del cuerpo es el ojo. Y como el hombre insistía en crear imágenes, decidió actuar para eliminarlas, esta vez en serio. Ya lo había intentado mucho tiempo atrás, tergiversando las escrituras, como hace siempre: decía que los cristianos no podemos usar las imágenes porque las adoramos y eso sólo le corresponde a Dios, y algunos se lo creyeron y estalló la crisis iconoclasta y llegó el Damasceno para poner las cosas en su sitio.
Pero esta vez era en serio. Algo había que hacer. Y decidió rodear el problema para alcanzar su objetivo y acabar de una vez por todas con la imagen, y peor si es una imagen realista: había que eliminar al que la produce. Y para eso pensó en cambiar el concepto de arte, creando confusión, y haciendo que los hombres se decidieran por una sola expresión artística y odiaran a la imagen, no fue fácil porque el ojo, que es la lámpara del cuerpo, insistentemente ve imágenes. Malditas imágenes. Una vez cambiado el concepto de arte, reducido a una cuestión de moda, vendría el cambio en la formación en las Academias de Bellas Artes, y como la base de su proyecto destructivo es el odio a la imagen, la educación artística se volvió solo conceptual, y se eliminó todo lo que durante siglos, los maestros habían enseñado para construir la imagen: la técnica. Y así los únicos artistas que quisieran hacer esas malditas imágenes, lo harían de un modo ridículo, porque ya no habría quien les enseñe, y lleva una vida aprenderlo. Y redujo el arte a la creación de tendencias, donde si estas fuera de moda, eres un ser ridículo. Y la imagen quedó fuera de moda. Si la moda es lo abstracto, la imagen es ridícula. Nadie recordaba que la primera instalación fue el primer volcán que entró en erupción y el primer video arte fue la primera aurora boreal; que los dibujos de los mármoles de una iglesia barroca superan al action painting de Jackson Pollok.
Después pensó en el ámbito del arte sacro, que en realidad era su primer objetivo, y hubo clérigos les entró pánico estar fuera de moda, alejados de ese nuevo concepto del arte, alejados del mundo. Y lucifer se aseguró del éxito añadiendo a esto el antiguo cuento iconoclasta, aquel que casi tuvo éxito, hasta que el Damasceno cogió la pluma, esta vez de mano de los amigos de Lutero, que también él se convenció de lo dañoso de adorar a las malditas imágenes.
Pero lucifer sabe bien que la lámpara del cuerpo es el ojo, así que para salvaguardar sus intereses él sí que usó la imagen, y mejor si era realista, para adueñarse de los hombres, y creó la deslumbrante estética del ejercito nazi, y los carteles de la propaganda soviética, siempre con la imagen, para convencer, para persuadir a los hombres. Y Picasso hizo un retrato de Stalin y aunque esta vez no usó el cubismo, aun así creó polémica, porque no era tan realista como convenía. Y para salvaguardar sus intereses, siguió usando la imagen, la imagen realista, y desarrolló la pornografía, y la descarga de imágenes, para que todos los cuerpos estuvieran en tinieblas.
Pero el ser humano insiste en ver imágenes y unos pocos recordaron que el ojo es la lámpara del cuerpo y si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz. E hicieron nuevas imágenes para persuadir a los hombres a elegir la luz en lugar de las tinieblas, y tocar los corazones de los hombres para que descubriesen que el origen de esa luz es la belleza de Dios hecho hombre que reposa en un pesebre.